¿Pero para quien trabajan esos líderes políticos que llevan el pin de la Agenda 2030?
Pues parece ser que no trabajan mucho para nosotros sino para intereses globalistas liderados por el foro económico mundial y que podemos ver claramente que trabajan en contra de nuestros intereses.
En este artículo expondremos algunos de los puntos (son innumerables) que no dejan ninguna duda de cómo los líderes trabajan para unos intereses que no son los nuestros, que no son los intereses de los ciudadanos que pagan sus impuestos y simplemente intentan levantar una familia o desarrollar una vida normal. Unas acciones en contra de la ciudadanía, con unos líderes que actúan con luz y taquígrafos restregándonos la agenda delante de nuestras caras.
Comencemos:
El precio del petróleo está por las nubes de forma artificial, principalmente debido a todas las políticas verdes que nos intentan convencer (en contra de los hechos, los datos y la realidad) que los combustibles son malos para el desarrollo humano. También se basan en la famosa religión del cambio climático del cual hablaremos en otro punto y que ahora no viene al caso, pero que tiene a toda la población de jóvenes y mayores convencidos (Greta Thunberg está más loca que cuerda, y sus conocimientos científicos son cercanos a la nulidad).
Uno de los líderes que más se esforzó en subir el precio al petróleo fue Joe Biden, que nada más acceder al poder, estableció las normas para limitar la producción de gas y petróleo en Estados Unidos, paró un megaproyecto para facilitar la conducción de gas y así hacer a EEUU, cómo en el reciente pasado, dependiente de otros países extranjeros, los cuales no son muy amiguetes de nuestro mundo occidental. Como consecuencia hemos visto como el precio ha ido subiendo sin tener techo.
Parece que eso no fue suficiente ya que nuestros respetables líderes necesitaban subir más el precio del petróleo; para ello no hay nada más eficaz que una guerra para hacerlo y sobre todo las sanciones asociadas a los malignos agresores. Sanciones que han tenido muchas consecuencias, pero sobre todo una, la reducción de la oferta de petróleo y gas, con el consecuente aumento del precio. Las sanciones impuestas alegremente por nuestros líderes Europeos y Norteamericanos se nos han venido en contra como un boomerang. Líderes corruptos y globalistas como Borrel, Von derLayen, Biden, etc.. rodeados de unos equipos que nos cuestan millones, aún no saben que si reduces la oferta manteniendo el resto de condiciones igual, el precio de las cosas suben.
Tras reducir la oferta de petróleo en EEUU, montar una guerra (que empujó hasta la extenuación con el apoyo de los Neocon y Victoria Nuland) y sancionar a Rusia, parece que estas acciones no eran suficientes. Necesitaban también enfadar un poquitín a otro gran productor como Arabia Saudita, con motivo o si motivo, pero sin analizar las consecuencias. El payasete de Biden llamó paria a Mohamad bin Salmán bin Abdulaziz Al Saud, príncipe heredero y primer ministro saudí. Parece que no le sentó muy bien y gracias a la magnífica estrategia de nuestro amado líder global, payasete Biden, ahora Arabia saudí y Rusia (que dominan el mercado del crudo y del gas natural) se han hecho muy amigos, y han decidido reducir la producción, sobre todo la producción dirigida al mundo occidental.
Pero por si esto fuera poco, y subir más los precios, no hay nada mejor que atentar contra los propios socios alemanes, y destruirles el Nord Stream2 (que era parte propiedad de Alemania) para que suban los precios del petróleo. La destrucción a través de un atentado terrorista (Anunciado, apoyado y aplaudido por Biden y Nuland), el mayor atentado ecológico del planeta hasta estos días, del proyecto ruso alemán que facilitaba el transporte del crudo, destruyó una herramienta estratégica para Europa que ayudaba a mantener una energía relativamente asequible para su población. Con esta acción hemos dado un paso más hacia permitir el terrorismo internacional y además desamparados frente a estos líderes que obedecen como perritos a los norteamericanos y a los globalistas.
La inflación tiene como primera causa el aumento de la masa monetaria en circulación, o sea, lo que denominamos comúnmente como "darle a la maquinita", que utilizan con alegría tanto Europa como Estados Unidos, y que lo pagamos y pagaremos con creces en detrimento de nuestra calidad de vida y en el futuro de nuestros hijos. Si a esto añadimos la subida del petróleo (que genera inflación) y los problemas generados en la crisis de suministros y logística (que también aumenta la inflación), vemos como nuestro poder adquisitivo baja diariamente, siendo los mayores perjudicados los ciudadanos y dentro de este bloque los que más los sufren son las clases bajas que votan a los populistas de izquierdas y comunistas que apoyan la agenda 2030; agenda que les está empobreciendo. La clase media, también sigue apoyando a partidos que apoyan esta agenda criminal y muchos ciudadanos apoyan a jefes de estado que también llevan en la solapa esta ignominia de pin. Pero bueno, como en muchos países, seguirán votando a nuestros amados líderes que nos llevan empobreciendo desde hace 40 años. Quienes nos han llevado hasta aquí no pueden ni deben ser los que aporten las falsas soluciones, ni los que vienen con ideas de izquierdas, ideas que tienen el record de empobrecer a países y regiones en todo el mundo (y de asesinar a sus ciudadanos).
La inmigración ilegal (apoyo absolutamente la inmigración, pero siempre bajo la legalidad y donde los inmigrantes se integren y acepten la cultura y prácticas de su nuevo país de acogida) está especialmente apoyada por estos líderes globalistas. Parece ser que los trabajadores de occidente no se dan cuenta de la estrategia pro agenda 2030 de los líderes globalistas de abrir las fronteras y permitir una invasión dentro de sus fronteras. ¿Qué pueden hacer estos millones de trabajadores nuevos en el mercado laboral? Pues muy sencillo, ofrecer una mayor oferta de mano de obra a menor coste para las empresas y con unas condiciones de mayor explotación. Tanto el PP como el PSOE, como los sindicatos y como la patronal saben perfectamente que la inmigración ilegal, aparte de los problemas de seguridad, culturales y degeneración de núcleo familiar y social, empobrece la zona donde se acaban implantando, además de perjudicar a los trabajadores "legales".
Saben qué la inmigración ilegal es negativa para todos nosotros, pero no solo protegen algo ilegal, sino que ayudan a que estas ilegalidades ocurran. Estos líderes incluso fomentan aquellas organizaciones que trafican con seres humanos engañados con falsas promesas y que no arriesgan su vida por cambiar las condiciones de sus propios países, tal como muchos países occidentales realizaron hace muchos años (Francia y su guillotina es un buen ejemplo). Los tiempos dirán pero ya podemos ver en países como en Francia o Bélgica los problemas que están generando. Por su parte, la familia de los líderes, nunca tendrán problema de encontrar un buen empleo.
La alimentación es un objetivo claro de estos líderes impresentables. No sólo quieren cambiar la cultura milenaria de nuestras regiones, sino que estos globalistas están empeñados, basándose en doctrinas (no en hechos contrastados) como la del cambio climático, que la agricultura tradicional es mala, que un buen chuletones es malo, que la carne es mala y que la alimentación mediterránea no es muy buena. Ellos creen que debemos comer insectos o cucarachas, pero los globalistas y líderes políticos comprados seguirán comiendo sus buenos chuletones y disfrutando de sus buenas fincas.
Las políticas que se están siguiendo contra los agricultores en occidente, que como ejemplo tenemos en Holanda, son realmente criminales y deberían de ser perseguidas y tratadas como crímenes contra la humanidad. Cada país debe defender su sector primario y defender su cultura gastronómica y sus vidas. No nos olvidemos que gracias a la alimentación mediterránea, España e Italia se encuentran entre los países con mayor esperanza de vida del mundo, mientras que países como Estados Unidos y países anglosajones en general disfrutan de una esperanza de vida significativamente menor.
La propiedad privada está siendo amenazada. No hay nada como la frase globalista de que no tendrás nada y serás feliz y realmente para los más jóvenes de nuestra sociedad, cada día es más difícil comprar una casa o un coche, o simplemente independizarse. Algo tan simple como intentar limitar los precios o legislar para reducir la oferta, mientras la demanda es igual o menor a la oferta, implica un aumento de precio. Parece ser que la asignatura de primero de cualquier carrera que explica oferta y demanda no ha sido muy leído por nuestra clase gobernante.
Legislan para limitar la construcción de casas y poner máximas barreras para que haya menos casas en el mercado, legislan para imponer impuestos abusivos a los propietarios, legislan para fomentar y apoyar la ocupación. Todas estas medidas ayudan a reducir la oferta, y con ello a incrementar el precio. Lo peor es que lo saben (y si no lo saben se gastan millones en asesores).
La censura y el control de estos últimos años han sido espectaculares para limitar la discrepancia científica, política, filosófica o incluso alterar la realidad y mantener relatos que son claramente falsos (si se sabe sumar). En colaboración con los billonarios del Silicon Valley, trabajan en consonancia para censurar, para limitar las expresiones y para definir que es verdad o no es verdad. Saltándose todas las leyes, toda esta gente trabaja para coartar las libertades de los ciudadanos. Incluso han llegado a censurar a científicos y médicos que no "compraban" los relatos oficiales. La fundación de Soros invierte millones para que agencias como neutral, diga que es fake y que no, siendo ellos mismos los más fake y mentirosos que existe en la profesión periodística.
Pero no paran solo con la censura, sino que el control que quieren infringir sobre nosotros basándose en la tecnología es brutal. Las monedas digitales, que los estados quieren desarrollar tienen un fin de control, de ahí que nos dobleguemos a la agenda 2030. Por ejemplo, si tú eres políticamente contrario a algo que haga el gobierno, éstos gobiernos, serán capaces de anular tus monedas digitales. Más o menos lo que ya ha hecho el tirano primer ministro de Canadá, Trudeau (Aparte de aplaudir hace poco a un Nazi), con los que se manifestaron en contra de las restricciones de las libertades ejecutadas durante el Covid o lo que está pretendiendo hacer china con sus ciudadanos. Como un breve ejemplo de este esperado control, la última asistencia del presidente chino a Davos donde todo el poder económico le aplaudió de forma eufórica por lo bien que lo está haciendo. Los globalistas tienen a este líder como un buen modelo a seguir para la sociedad occidental actual en lo que se refiere a recortar libertades, o marcar lo que es verdad y lo que no..
Esto son unos breves ejemplos de lo que tenemos enfrente de nosotros y que la gente no quiere ver, pero están ahí... A ver si despertamos...
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